Compañía de Jesús
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   En general el nombre de compañía se aplicó a diversos institutos o congregaciones religiosas. La más conocida e internacional de esas sociedades fue la Compañía de Jesús fundada por San Ignacio de Loyola y aprobada por Paolo III en 1540
   Educativamente tuvo importancia por la orientación educativa de la institución, para cuyos colegios S. Ignacio inspiró a varios miembros el que redactaran una plan de estudios (Ratio studiorum) preparado en 1586 y publicado el año 1599.
    La importancia de este proyecto pedagógico no está tanto en la bondad de sus preceptos, cuanto en la influencia grande que ejerció en otros institutos educativos surgidos en los siglos posteriores

La importancia dada en el plan a la formación religiosa fue grande, sobre todo en su aspecto doctrinal, para combatir los errores y desviaciones protes­tantes, de las que los jesuitas se declararon institucionalmente adversarios desde los primeros momentos. (Ver.  Ignacio de Loyola. San)